sábado, 16 de enero de 2010

ME HABLO DE TI EL MAR

Ayer el mar me hablo de ti,
que te ve triste y pensativa;
noche tras noche
lo visitas sin falta.
Esta preocupado por las lágrimas
que brotan de tus tristes ojos,
sin descanso.

Me cuenta que tu mirada
esta triste, melancólica,
intentando encontrar un porque,
a tus ojos le falta la luz
y ese brillo de antaño.

Cuéntale al mar tu dolor,
el porque de tu triste mirada,
dile porque se apago su luz,
tu brillo y tu felicidad.
Pídele consejo al mar
para que te devuelva la sonrisa,
que seque tus lagrimas,
y vuelva a ti la felicidad.

IMPACIENTE

Quieres ver el sol
sin espera alguna,
quieres que se vayan las nubes,
que no puedes esperar.
No te importa nada,
tan solo quieres ver el sol.

Impaciencia,
¿una virtud?
¿Sera un defecto?
Que más da,
asi eres tu; natural
pero impaciente.

Quieres dar un salto al cielo
para poder cuidar de las estrellas,
que nadie las moleste,
que no pierdan su brillo
y cuidar que esa estrella fugaz
caiga sin miedo y sin dolor,
que no llegue a estrellarse nunca,
con un duro suelo
o quizás se pierda en un mar sin nombre.

Quieres correr a ver las olas
¡Qué vengan ya!
No quieres esperar
a que la fuerza natural
las devuelva otra vez a la orilla.
Que mientras tú las mires
estén ahí sin retroceder,
a tu lado, solo para ti.